21 de septiembre de 2018
Distancia: 46km
Desnivel acumulado: 838mt
IBPindex: 63
Crónica por Ana
Un día más, no sé muy bien por
qué, me toca hacer la crónica en San Mateo, deben ser las reminiscencias del
pasado.
Cuando llego el viernes a la
gasolinera de Las Gaunas, después de haber pasado por la fauna que quedaba por
el centro de la ciudad y que, por supuesto no tenían mucha traza de ir a montar
en bicicleta, veo que no hay nadie en el punto de encuentro.
Primer pensamiento, me he
confundido, o nadie se ha animado a celebrar San Mateo, con una ruta mañanera,
miro hacia la cafetería y veo la “naranja mecánica”, y digo para mis adentros,
bueno al menos está Dieguito…
Al salir de la cafetería ya
había aumentado el grupo de ciclistas dispuestos a celebrar la fiesta lejos del
pisado de la uva, Isra, Dieguito, Vitín, David, Rober, Toño y la menda que
suscribe, ¡¡¡muy bien, muy bien, plas, plas, plas!!!
Nos dirigimos hacia Lardero,
subimos hacia la cuesta de las vacas, camino de Sorzano.
Mientras ciclábamos, escucho a
Dieguito hablando con Vitín sobre algo como “anapurna”, y pobre de mí, le
pregunto, a Vitín, ¿a qué os referís con anapurna?
¿Quién me mandará preguntar?
A lo cual responde Vitín, pues
que vamos a cambiar la ruta y hacemos esa subida, SORPRESA, EXPERIMENTÉ MI
PRIMERA MODIFICACIÓN EN UNA RUTA…
Pensando, ¡¡¡qué bien, vamos a
subir el Anapurna, en cuanto empezamos la primera subida, entendí el por qué de
semejante referencia, subida rompepiernas dónde las haya!!! Ahora, me lo pasé
pirata!!!!
Una vez que hemos acabado la
senda, nos dirigimos a subir la subida del Gas, con el fin de llegar a la
bajada del Campeonato de La Rioja, de no se sabe muy bien qué año, le pregunto
a mi hermano y me comenta que al menos unos quince años.
En esta exigente bajada de
nuestro querido David, por tener a bien avisarnos de la bondad en el agarre del
terreno en la bajada, escuchamos un cataplof, ¡¡¡oh, oh!!!
Parece que ha habido la
primera caída del día, este susto nos hizo al resto bajarnos de la bicicleta,
por si acaso y por miedo y por vergüenza a ser el siguiente.
De ahí nos dirigimos hacia
Sojuela, a la fuente para el avituallamiento líquido, de repente vemos que
viene un ciclista, casi sin resuello, diciendo: “os vengo siguiendo toda la
ruta, menos mal que os he encontrado aquí” era Ricardo que había madrugado
menos que nosotros, o lo mismo venía derecho de Canales, pero había corrido
como un jabato…
Vamos hacia el Chorro de las
Abejas, dejando a la izquierda el embalse de Sojuela, continuando una subida
paralela al Molinero y nos deja en el riachuelo de agua que había que pasar
empujando la bicicleta, donde algunos metimos la zanca en el barro y otros,
como Dieguito, tras varios intentos tuvo que apearse de la bicicleta y hacerlo
andando…
Como siempre después de una
larga subida, llega la maravilla de la bajada, aunque la primera parte fue por
el cortafuegos, seguidamente, nos dirigimos hacia la Senda de los Pitufos (no
vimos ni a los Pitufos ni a Gárgamel) bufff, preciosa bajada, terriblemente disfrutona,
segura, con buen agarre, al principio unas zetas y después senderito, en fin una
gozada, como siempre.
Bajamos de vuelta hacia la
bajada de la Dehesa de Hornos y de ahí a Navarrete, donde cogimos caminito de
vuelta a casa.
Siguiente parada Nebraska,
unos almuerzo, otros cervecita, otros a buscar a sobrinos para hacer otra
vueltita en bicicleta por La Grajera, a ver si conseguimos algún ciclista
portento en la familia….
3 comentarios:
Buena crónica Ana, se nota que te empapas bien de los sitios por los que pasamos.
Dices que no vimos a ningún Pitufo, pero llevamos uno toda la ruta con nosotros para que queremos ver mas, con ese nos sobra.
La "jodienda" del día fue la lesión de David en la pequeña caída que tuvo; rotura de escafoides que lo tendrá unas semanas alejado de la bici, estoy seguro que cuando vuelva todo seguirá igual, nos llevará con el gancho (como ahora).
Otro San Mateo disfrutando de lo que mas nos gusta, la bici y los amigos.
Pues si Ana, una crónica muy fluida. Me gustó tu crónica.Una pena la lesión de David y de Richi solo solo ¡Cómo andas Richi!
Antes de nada, parafraseando a Leticia Sabater, perdón por el retraso.
Me ha gustado la crónica, corta pero intensa, como estas rutas con las que la Cúpula nos ha obsquiado en estas fiestas mateas para poder compaginar las obligaciones y las devociones.
Hay que denunciar, aunque Ana por prudencia no lo haga, que tanto Vitín como Dieguito en cuanto falta Pepón se saltan las normas de las Ordenanzas de Ordanzas y violentan el sagrado mandamiento del Track, cambiando las rutas a su antojo con total impunidad (Que Pepón les perdone por que, en caso, contrario su ira será temible).
Lástima lesión de David en una caída de lo más tonta al que deseamos una pronta y total recuperación.
Publicar un comentario