24 de febrero de 2013
Distancia: 51km
Desnivel acumulado: 936mt
IBPindex: 71
Crónica por Pepón
Llegó el domingo esperado con ganas para nuestra salida habitual,
y ¿que es lo que veo al mirar el termómetro?
-Pero si marca 1º, tendré que abrigarme bien.
Levanto la persiana y…
-Coño, como nieva.
El día es el ideal para volver a meterme en la cama y dejar la
salida para otro domingo, pero hay algo que me dice.
-Sal a andar y no pongas disculpitas no vaya a ser que te
arrepientas y te pierdas una salida con algo para recordar al menos durante
este invierno.
Bueno, pues dicho y hecho.
Me tomo un buen desayuno y al trastero a ponerme la ropa de
ciclista.
A las 8 ya estaba en las Gaunas y fueron apareciendo, con
cuentagotas, algún intrépido o loco compañero de fatigas dispuesto a disfrutar
de la meteorológicamente desapacible jornada como buenamente se pudiera.
Nos juntamos Santi, David, Víctor y yo, y ¡gracias a Dios!, Víctor
venía con una bonita y lo que es mejor, buenísima bicicleta nueva, vaya máquina
se había comprado, una canyon preciosa y con unos componentes extraordinarios.
Espero que la cuide bien y le dure mucho tiempo para que la disfrute.
Os preguntareis quizás, el porqué del ¡gracias a Dios!, bueno, la
respuesta es obvia, ya era insoportable el ir a su lado con la bici vieja,
parecía un hombre orquesta pero desafinado, crujía más que un puente de madera,
menos mal que eso desde ayer a pasado a la historia. Si a esto sumamos que
David cambió los pedales, no se oía un mal ruido al empezar la marcha.
Hicimos la espera de rigor y sin más nos pusimos en camino
dirección a Sorzano. La nieve caía despacito, casi ni mojaba el suelo, pero al
subir la cuesta de las vacas la cosa empezó a cambiar y se veía que aumentaba
poco a poco la cantidad de precipitación. Subimos a buen ritmo y para no coger
asfalto nos metimos por la zona de la llanada e ir por camino hasta el pueblo.
Santi, comento que tenía que estar en casa a las 10 h. y unos
cientos de metros después de comenzar la subida a Moncalvillo, se dio la vuelta
para no llegar tarde pues jugaba su chiquillo pequeño a las 12 h. en Arnedo y
no era cuestión de tal y como estaría la carretera ir con prisas al partido.
Seguimos subiendo, la pista cada vez estaba con una capa de nieve
más gruesa y daba gusto andar por ese manto de nieve virgen. En fila de a uno,
subíamos tranquilos y yo después de pasar el desvío hacia la regadera, a unos
300 m. paré para ponerme ropa pues debía de regresar a casa. Al llegar Víctor a
mi altura echamos un bocado y nos dimos cuenta de que David no volvía la cabeza
ni para ver donde estábamos, ¿como le puede gustar a este tío tanto la nieve?
Es peor que los mocetes.
Despedida y para casa. Hay una cosa que no entiendo, el bueno de
David ya te endilga la redacción de la crónica aún cuando no vayas a hacer la
ruta completa, algún día le tocara a alguno que se haya quedado durmiendo, el
hacerla. ¡Este David es la hostia! Que rigor.
Bueno y a partir de aquí que comentar, pues que no me tropecé
apenas ciclistas en mi regreso, como mucho una docena (otros días son
multitud). Que bajando pasé más frío que el centinela de Pamplona y que llegué
a casa con más hambre que el galgo de don Quijote.
Espero que mis compañeros llegaran también en buenas condiciones.
Después de la ducha, buen vaso de caldo y almuerzo de comida
latina.
Una latina de sardinas y una latina de anchoas, para postre queso
y no hay más que eso.
El domingo iremos a Lodosa, si el tiempo lo permite, a dar la
vueltita que todos los años nos preparan nuestros amigos Unai y Enrique.
Esta mañana al llegar al Winnie pub, me he enterado más o menos de
hasta donde pudieron subir los intrépidos Víctor y David ya que he visto un
video que colgaron de la zona por la que iban ya caminando ante la cantidad de
nieve acumulada. También me han comentado que David se quedo con ganas y el
animal se subió después hasta los pinos de la zona de la hoya en Clavijo. A
este no hay quien le ponga límite, está hecho un animal.
FOTOS AQUÍ:
4 comentarios:
Hubo muchos cocoguagua el domingo pero se perdieron una buena nevada a David por poco lo tengo que sacar de la nieve arrastras.
El día estuvo genial.
Crónica sin alardes, al pie de la letra. Muy bien.
Otra día que el señor mayor "mojaria"las sábanas.
Salud,
Barrancas.
Su Reverendísima Santidad es un hacha escribiendo, tanto le da una crónica de los OR como una encíclica.
TOTUS TUUS!!!
El viernes si que hubo cocoguaguas. Salimos solo me, myself and I
Luis.
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