12 julio, 2020

Peña Bajenza-Senda de las casetas del agua (16 Ciclistas)



EL NOTICIARIO DE LAS TRES

UN PORTENTOSO RELATO DE
 TOÑO PLEITOS

14 de junio de 2020
Distancia: 56km
Desnivel acumulado: 947
IBPindex: 70



Crónica by Toño “Pleytos”


Vitin, David, Fran, Álvaro, David Villaverde, Dalmau, Luis, Israel, Javi, Fer, Ricardo, Edu “Ayuntamiento”, Felix, Dieguito y Jero.


Día 92 del Estado de Alarma, domingo al mediodía, después de una frugal comida me siento en mi sillón preferido para ver qué ha pasado en este mundo pandémico. Las tres en punto. El sonido de las señales horarias se pierde en la cortinilla musical anunciadora del telediario. Aparece en pantalla una presentadora de mediana edad (aunque seguro que es más joven que yo) y empieza a desgranar las noticias.
“… en primer lugar hemos de dar cuenta de los acuerdos adoptados el día de ayer en la conferencia de presidentes; el más importante ha sido determinar que la salida del domingo será la subida a Peña Bajenza por el Áspero y la bajada por la senda de las casetas del agua, a pesar de que en el ordenamiento vigente (el Sagrado Libro de Rutas) no era la que correspondía. Por este motivo fue anunciado por el Rey Emérito José Eugenio I  la interposición de recurso de amparo contra dicha decisión. Por su parte, el Presidente de la Generalitat (el Molt Honorable Josep María Dalmau) insistió en que no se trata de Peña Bajenza sino del Castillo de Viguera en clara contravención de las competencias autonómicas y muestra del nacionalismo español centralizador.

Vaya rollo, pensé, todos los días lo mismo!!! La cúpula política no se pone de acuerdo en nada, solo en no estar de acuerdo con el contrario.

Me tiré un pedo desaprobatorio y conseguí concentrarme en la siguiente noticia; “la crisis provocada por la pandemia hace conveniente la adopción de medidas de ahorro energético; el presidente de Iberdrola Víctor Troya ha decidido dar ejemplo pedaleando sin ayuda hasta la subida de Viguera. Otros representantes del sector como Javier Bartolomé y Fran Palomo tildan la medida de propagandística y han aportado un dossier que demostraría que al 10% se ahorra lo mismo y se te queda mucho mejor carácter.”



Ha sido muy comentada en los mentideros políticos la presencia en la salida del díscolo Vicepresidente Segundo del Gobierno Diego Monasterio, que en fechas anteriores había mostrado afinidades sospechosas con el líder de Bildu Santi Sainz, provocando que desde la oposición lo tildaran de antipatriota y traidor. Con su presencia en la ruta ha querido desmentir esos rumores aunque, por otra parte, en los momentos previos a su inicio se le ha visto hablando animadamente con los independentistas de Esquerra Matrakonana. Este asunto parece que se va a convertir en el culebrón del verano que está a punto de entrar”.

A mí siempre me ha parecido que este Diego es buen político y que tiene una prometedora carrera por delante aunque, tal vez, ha llegado a lo más alto demasiado rápido y necesita un tiempo para digerir su nuevo estado de forma y darse cuenta de cuál es su sitio. Vamos a darle tiempo al mocete.

Estaba pensando en esto cuando la presentadora empezó a desgranar las medidas de seguridad a adoptar por la ciudadanía en las salidas ciclistas según la nueva orden ministerial aprobada por el Ministerio de Sanidad; 1) la distancia de seguridad no será dos metros sino la necesaria para que te esperen los primeros cuando lleguen al cruce o la cima de una subida, 2) es imprescindible el uso de mascarilla, es decir, tienes que adoptar una expresión facial tal que los demás componentes del grupo (en especial los que vayan tirando) no puedan percibir que te están sacando de punto y 3) la utilización de geles hidroalcohólicos es obligatoria pero solo al final de la ruta y en los puntos de repostaje (Nebraska y Tierra Lara) y únicamente queda autorizada la utilización de tres tipos: birra, tintorro y ceregumil.



Todos los días lo mismo: distancia social, aforo máximo, medidas de higiene…, qué peñazo!!! Me parece que me voy a echar una cabezadita…
Mis párpados se cerraron y mi conciencia empezó a caer en un prolongado y suave descenso hasta que me vi subido en mi eSpléndida montura en la cuesta de Viguera mientras nos adelantaba un pérfido Vitín con su eléctrica y una ladina sonrisa que iluminaba su taimado rostro para motivar el ataque de los pros. Dicho y hecho; ahí saltaron como un resorte Diego y Alvarito dejando al resto de los mortales contemplando con la boca abierta su duelo cuyo final no pudimos presenciar en la distancia (aunque las malas lenguas afirman que uno de los duelistas sufrió una impresionante flojera de patas en cuanto dobló la curva y se sintió a cobijo de la mirada de sus “compañeros”).



En mi sueño el grupo ciclista de número adecuado a la normativa sobre máximo de componentes del mismo (menor de 20) se dispuso a afrontar la dura cuesta de la cantera, en cuyo inicio y antes de la portilla  habían dejado unos montones de tierra que impedían un cómodo acceso. Además en los primeros metros de ascensión se había formado una riera profunda y larga que a más de uno le hizo echar el pie.


En mi duermevela, mientras un hilillo de saliva me caía por la comisura del labio, me pareció escuchar de nuevo a un experto hablando de la importancia de la distancia social o interpersonal que nunca debía ser inferior al metro y medio… Esta pequeña reconexión con la realidad me produjo un fuerte efecto por cuanto en mi sueño era precisamente a esa distancia (metro y medio) a la que se quedó el gigante de Aranda de culminar su ascenso del atajo. Vaya mala suerte tiene este chico le crecen los corderos sin poder compartirlos con los amigos y el atajo se le sigue resistiendo por no saber andar en bici.


Después de la parada de reagrupamiento y de que Jero solucionara los problemas que tenía con el churro (el de su rueda trasera) emprendimos la escalada de la curva por la senda del áspero, siguiendo el exigente ritmo impuesto por la Blasa e Israel. Exigente porque a la velocidad que ascendíamos había que hacer verdaderos equilibrios para no echar pie.


Una vez alcanzado el pico de la salida y antes de comenzar la desescalada, mientras comíamos unos suculentos bombones de la Caja Loja (que el gobierno Chino había donado como material sanitario) se produjo la comunicación de que existía un nuevo infectado en el grupo y que, en consecuencia se procedía a su aislamiento.



El infectado se trataba del insigne profesor Barrancas y la infección no era por coronavirus, era una nueva enfermedad; mieditis. El sujeto recordaba que en la anterior ruta realizada por esos lares besó el suelo y ese recuerdo le provocó un miedo reverencial a sufrir una recaída. Al paciente se le prescribió un tratamiento consistente en una ración generosa de cordero asado (una sola toma) mejorando notablemente.


La mejora notable del profesor Barrancas contrastó con el empeoramiento repentino y virulento del estado de salud del presidente de Iberdrola Víctor Troya. Este sujeto, en plena desescalada hacia la cruz de Peña Bajenza, tuvo el delirio de que era un verdadero descender y se puso a derrochar sus facultades endureras hasta que la triste realidad (en forma de arbusto) le hizo comprender que era un manirroto.

Todos los componentes de la ruta le hicimos el vacío para ver si, por fin, nos lo quitábamos de encima, como cuando cayó en Viniegra y casi se lo llevan los buitres, pero nada; el tío no se dio por aludido y se pegó a nosotros como una garrapata mientras repetía a todo el mundo; “no, si no me duele nada… esperadme CABRONEEES


Después del consabido photocall en la Cruz de Viguera emprendimos viaje hacia la nueva normalidad justo cuando empecé a desperezarme de mi sueñecito y la presentadora de mediana edad, pero seguramente más joven que yo, daba cuenta de la paralización de la economía y la brusca caída del PIB.


-         “Pues sí crees que es brusca esa caída… qué dejas para la de Bartolo en el comienzo de la senda de las casetas; cuando el pobre se dio con una rama en el manillar y rodó poyo abajo con la soltura de cuando escribe esas crónicas tan logradas con las que nos deleita.”



Logré pensar esto mientras, entre sueñecito y sueñecito, asomaba la cabeza como un pez en una pecera, cogiendo los bocados de realidad que la televisión me iba ofreciendo para, poco después, dejarme sumergir de nuevo mi ensoñación de lo que esa mañana no había ocurrido sino en mi imaginación.



Y digo esto porque, a pesar de parecerme todo muy real, es claramente imposible, por ejemplo, que Vitín después de tener una rotura con desplazamiento del quinto metatarsiano en vez de ir a urgencias hubiera venido a almorzar al Nebraska y, no solo eso; sino que recuerdo vivamente como untaba con la mano lesionada con la voracidad  de una piraña, tampoco puede ser muy real que el monarca emérito José Eugenio I se dignara a compartir unas humildes viandas con nosotros después de la ruta o que hubiera sido posible que el Vicepresidente Segundo del Gobierno Diego Monasterio hubiera sido capaz de bajar entera la senda de las casetas sin detenerse en esa portilla cuyo paso era más estrecho que el agujero de un alfiler…



En fin es de todo punto imposible que hubiéramos tenido un día tan espléndido, con un sol magnífico, una atmósfera limpia y fresca, unos paisajes espectaculares, sendas que parecen diseñadas por un grupo de expertos contratados por el gobierno, que nos hubiéramos esforzado, sudado y gozado tanto todos los componentes del grupo por separado pero que al hacerlo juntos nos supiera mucho mejor, nos supiera a gloria… No, no. Todo eso no es posible, debo estar soñando… por favor dejadme dormir un ratito más, sumergido como un pez y quedaros vosotros con la realidad.





FOTOS AQUI:


7 comentarios:

vitinbtt dijo...

Gran crónica, como siempre da gusto leerte Toño.
Una ruta de las BB aunque acabé con un huesillo roto, nada que no se pueda arreglar con unas semanas de descanso.
Gracias a todos por el apoyo y enseguida nos vemos pedaleando otra vez.

Anónimo dijo...

Gran crónica Toñín. Puede aprender alguno.
Salud,
Barrancas.

Pepón dijo...

Que grande eres "pequeño". Solo queda darte las gracias por las ganas y la calidad que pones haciendo la sagrada crónica de la salida oficial para regocijo de tus humildes lectores.
Enorme Toño, siempre aportas categoría a la cuadrilla. Lo dicho Toño, muchas gracias porque así da gusto.

Félix dijo...

la de mediana edad que seguro que es más joven que yo.....bla bla bla ,retorica superficial con la que crees y piensas que dejas la lector emocionado y deslumbrado, para mi muy frivolo
No eres como vulgarmente se dice " un buen vino que con loa años mejora " aquí noto que es totalmente lo contrario , estas empobreciendo intelectualmente
Dieguito te da caña y llámale a ver qué tal está.

Miguel_Bike dijo...

Qué pedazo de crónica, que bien me lo he pasado leyendo, me he ido haciendo la idea de la ruta sin haber ido, en fin una gozada.

israelogro dijo...

Gran crónica Toño, la ruta una gozada, muy divertida. Ánimo Vitín

Fer Alcalá dijo...

Enhorabuena Toño por ésta gran crónica.
Me alegro de haber empezado a leerlas otra vez y coincidir con tanta calidad.
A destacar también las fotos, sobre todo la mía bajando un escalón imposible. Decir que viví en directo la caída de Vitin y debo decir que no tuve nada que ver, pero que en esta vida no hay mal que por bien no venga. Ahí lo dejo....
Sigo sin saber quién cojones es la tal Blasa.