28 diciembre, 2010

Trevijano por zorra la muela (6 Ciclistas)

26 de Diciembre de 2010

Distancia: 52km

Acumulado 2010: 2977km

Desnivel acumulado: 975mt

IBPindex: 88

Perfil

Track y Google

Crónica por Tatepin

Santi, Juan, Jesus “Educador”, Tate, Ramón y Víctor.

Llego tarde, la carne es débil; la cama me ha tentado tres veces, para caer en sus garras: la primera cuando sonó el despertador y sin pensar dije ummmm un ratito más; la segunda una vez ya de pie y yendo ya tarde antes del desayuno, diciéndome dónde coño vas con este frío y la tercera poco después, susurrando: ehhhh: dónde vas con la barriguita llena y con esta mañanita de perros, lo mejor es que sucumbas a mis brazos…. Sin embargo, todavía sin saber cómo, pudo el encanto de unos hombres malos de naranja que me iban a hacer sufrir, no hice caso a tan buenas tentaciones. Salgo de casa y para autoanimarme digo:!! pues no hace tanto frío!!! Y poco después rodando por las calles y viendo tan poca gente y tan tapada me digo: ¡soy un Gilipollas!

En las Gaunas habia otros cinco gilipollas y comenzamos a rodar hacia el sur hasta que averigué que nos dirigíamos hacia Cenzano, donde no se había podido ir el viernes.

Algo más adelante se me ocurre decir: ¡pues podíamos ir a Trevijano que está mi hermana y nos puede dar de almorzar! Por lo que sucedió a continuación, les pareció una idea excelente; dice Vitín ¡pues podíamos bajar por la senda de los corrales de Zorralamuela! Y yo asentí diciendo que el día anterior había estado allí con mi hermana y la perrita. No me había dado cuenta del berenjenal en el que me había metido yo solito, cuando se acabó de fastidiar, dice Victor:, ¡pues ya que pones tu la ruta, haz la crónica!

Seguimos caminito, cada uno quejándose de las extremidades que no sentía y atravesamos Alberite, La unión, Clavijo, la Hoya y digo bien atravesamos porque no paramos debido al riesgo de congelación y llegamos hasta la alambrada y portilla justo antes del desvío de la pista principal, dónde paramos un poco a echar un trago de granizado de Isostar y para avisar a mi hermana de la que se le venía encima.. Desde Clavijo, en las umbrías había un dedito de nieve que no nos obligo a descabalgar el ningún momento. Giramos a la izquierda hacia Cerro La muela (dónde comienza la senda del piojo) y seguimos ascendiendo. Algunas trampas de hielo en las roderas que al atravesarlas se rompían y otras por las que pasábamos de puntillas hasta la llegada arriba.

El paisaje era impresionante; sol, nieve y un frío del carajo. Desde Cerro La Muela se veía todo: Ioar, Pirineos, otros países, otros mundos; un día muy despejado.

La siguiente tarea era enlazar con la senda de Trevijano sin llevar el track. Yo confundo las corrales de arriba con los de abajo y esto nos hace desviarnos un poco; sin embargo la nieve está excelente para bajar y agarra muy bien así que enseguida encontramos las huellas mías del día anterior y la senda que nos llevará al pueblo. Antes de llegar a Trevijano, parada obligada para visitar la nevera y a los nuevos burritos que hay en el lugar.

Al llegar a la plaza los componentes del grupo estaban congelados pero algo temerosos de subir a la casa a echar un bocado. Los miembros del grupo se quitaron ropa y reaccionaron positivamente ante el brasero; algunos fueron capaces de levantar las faldas de la mesa camilla incluso con las manos trabajando el caldito, el huevo frito y el chorizo. Nos acompañó un vino de viñas jóvenes de Miguel Merino que estaba delicioso. Cafecito, bizcocho y a ponerse los ropajes para bajar a la capital por la carretera hasta Ribafrecha. Hay que decir que para entonces la temperatura externa había subido muchísimo, hacía ya -1ºC. Ni nos enteramos de la bajada porque en 47 minutos estábamos en Las Gaunas .

Tras este día sólo tengo un pensamiento que se ha repetido varias veces ¡Y yo que estuve a punto de sucumbir a la tentación! Creo que me hubiera acordado toda la vida. Hoy ha sido de esos días que no se olvidan. ¡Gracias amigos!

5 comentarios:

vitinbtt dijo...

La ruta fue espectacular con esa capita de nieve pero lo que si que estoy es muy agradecido a la hermana de Tate que nos trató maravillosamente y entre el caldito y los huevos con chorizo nos dieron fuerza para llegar a Logroño. GRACIAS.

Anónimo dijo...

todo ha estado muy bien ,la ruta ,el almuerzo,pero lo mejor de todo son los adjetivos de tate asi el y a los de turno jejejejeje
GRACIAS
El medallero olimpico

Jose Miguel dijo...

Viva esos locos por el mountain bike.
Nos puede la afición.
Ese blogista no se pierde ni una,vaya
oficio te has buscado Víctor.

Anónimo dijo...

Buena ruta,gran paisaje y soberano almuerzo.Me alegro de que lo pasarais tan bien.ENHORABUENA

Anónimo dijo...

Tate:
Cuando quieras volvemos.
Ah!, y muchas gracias a la Tata de Tate.
Lo que se perdieron los que no vinieron.
Abrazos,
Juan "Epi".