9 de diciembre de 2019
Distancia: 50km
Desnivel acumulado: 837mt
Ibpindex: 64
Crónica por Vitín
Luis, Dieguito, Israel, Fran,
Javi, Toño y Vitín.
Hoy es lunes, hemos salido viernes
y Domingo (algún insaciable también lo hizo el sábado), voy dirección de la
gasolinera sin saber que vamos a hacer esta mañana; según Dieguito una ruta
para estirar las piernas después de dos salidas casi seguidas.
Cuando estamos todos (hoy
poquitos) se nos comunica que iremos a hacer Los Pitufos (de subida) y como se
le hace poco, subiremos a hacer medias neveras; bueno, para estirar las piernas
de los que van en bici, no está mal; a los que vamos con “chispa” nos importa un pito.
Hoy, después de varios días sin salir,
se presenta Javi en la gasolinera, ya ha acabado con toda la cosecha de olivas
de la zona de Lardero, es lo que les pasa a los terratenientes, tienen que
atender su “hacienda”.
Vamos por el camino de los judíos
hasta llegar a Navarrete, el ritmo es tranquilo o eso nos parece a los
“enchufados”, por cierto, solo van 3 en bicis, hoy los “otros” somos mayoría,
en la foto se nos puede ver en la parada del bus ya que nos da igual ir con
motor de combustión que eléctrico, nos cansamos lo mismo.
Nos metemos por la viña que va a
la Dehesa de Hornos, los caminos están espectaculares, las lluvias de estos
días pasados han dejado el terreno húmedo, pero sin barro lo que hace que esté ideal para andar en bici.
Nunca nos vamos a librar de tener
que esperar a Israel, igual le da ir en bici, en moto o en motoreta, le gusta
que le esperemos y a nosotros nos gusta decir ¿“ha llegado ya Israel” ?, esto
es lo que pasó al presentarnos en Daroca, donde paramos a alimentarnos e
hidratarnos ya que a partir de aquí “les” toca lo duro, subida de los Pitufos y
llegar hasta las medias neveras. También nos gusta decir ¡¡Falta Fran!! Pero esto ya no lo decimos,
este tío se ha puesto en forma….
Cogemos la pista dejando Daroca a
la derecha, la pista es muy dura aunque llegamos al cruce de Los Pitufos
rapiditos, la verdad que la subí con suma facilidad al lado de Dieguito y Toño;
vamos manteniendo la forma a pesar de la edad y la mala vida; a algunos no nos
hace falta cuidarnos mucho para mantener el nivel muy alto, bueno el caso es
que nos metemos por Los Pitufos donde el terreno está mejor que nunca y esta
senda es una maravilla (mejor de bajada que de subida, como todas), se sube
como si fueses en ascensor, llegando al
punto mas alto sin nada reseñable que contar.
Al poco salimos a la pista
principal que viene de Sojuela y comienza la subida dura, dura, de pista blanca
que nos llevará hasta la cima de la ruta, aquí se pone el “jovenzuelo” a tirar
del “tayudito” y van haciendo camino
entre alardes y sufrimiento de estos máquinas, pero ninguno de los dos quiere
llegar segundo; ahí, en la zona mas dura se nota la fuerza de la juventud, es
imposible hacerle frente ni “enchufado”, enseguida llega el resto agotados, uno
de ellos nuestro amigo Luis I “El castigado”, el tío que inventó el dicho: “las
nuestras son bicis de campo”, siempre haciendo “carrera, carrera” y aunque no
siempre llegue el primero es de las personas que mas veo disfrutar encima de la
bicicleta; aquí nos hacemos la foto de grupito y salimos pitando por la senda
de las neveras.
La senda está en perfectas
condiciones, como ya he dicho anteriormente, el terreno no puede estar mejor y
aunque hacía tiempo que no aparecíamos por ahí la bajada es rápida y segura, la
realizamos sin problemas, pero si nosotros pensamos que bajamos deprisa hay que
ver al “Gato”, bueno, fue visto y no visto, entrar en la senda y desaparecer,
algo se “fuma” nuestro amigo… y también lo digo por que después de salir del
bosque nos dice que vamos por “los pedrolos”, no me puedo imaginar como habrán
sufrido los de las rígidas, si con las dobles no es nada cómodo, sin amortiguación
trasera ni te cuento.
Bajamos a Sojuela por la pista
del chorro de las abejas y sin parar, directos a Logroño que nos espera el
almuerzo de cada domingo en el Nebraska, allí están esperando Edu “jabalí” y
Pepe (cuanto te echamos de menos) para acompañarnos en la mejor labor de la
mañana, los huevos con jamón una tradición que lleva con nosotros la friolera
de 20 años.
2 comentarios:
Vito, estoy pasando a limpio la crónica de Rafa, del día de Nochebuena, y es más larga que la tuya, que ya es decir. Fue ruta corta y sin novedades, pero a todos los días se les saca algo. Aunque llueva. Y éste no fue para menos. Lo pasamos muy bien con una agradable mañana. Lástima que me perdí el almuerzo. Echamos de menos las broncas de Pepón. A ver si vuelves pronto a poner orden en el pelotón. Que se nos va a echar a perder.
Luis.
Buena crónica Vitín aunque echo a faltar tus afamados comentarios vitriólicos, deja de autocensurarte o te saldrá una úlcera
Publicar un comentario