Crónica por Miguel Angel
03 de Agosto de 2008
Distancia: 57Kmt.
Acumulado 2008: 1878Kmt.
Desnivel acumulado: 921Mts.
IBPindex: 96.63
Alberto”solera”, Fernando, Javi, Jose Luis, Miguel Angel y Jesus.
Se nota que estamos en fechas de vacaciones, o no hay ganas de madrugar, o la gente está en sus destinos de vacaciones, porque somos cinco los que aparecemos en la gasolinera, por cierto Fernando vino andando con la rueda trasera pinchada, así que una vez reparada, comenzamos la marcha.
Como siempre, camino viejo de Alberite, luego Albelda e Islallana y en vez de subir a Viguera, vamos a ir por la senda de los pescadores, Termi, se queda detrás de mí para observar mis dificultades con cualquier imperfección del terreno, ya que si no la hay, ya me la invento.
Llegamos al puente medieval de Viguera, de ahí, en vez de ir por la carretera vamos por un camino paralelo, dónde Fernando tiene su primera incidencia, (sin importancia), con una manguera de regadío, que atravesaba el camino.
Aquí, en Castañares tenemos que coger la rampa que sube a la carretera, no la subimos nadie hasta arriba, debido a la cantidad de piedra suelta, por cierto casi se me olvida, a Fernando no le sale a tiempo el automático y se baja de la bici de lado, (sin importancia).
Pasamos Castañares, tomamos el camino que hay a la derecha, abrimos la puerta y……, a subir que toca, casi 5 Km. de subida, pendiente media del 9%, máximas de 20% (según GPS), pequeña parada en el cruce que viene de Sorzano, seguimos la ascensión, para llegar a la cota más alta de la jornada, 1.100mts.
Aquí nos hacemos la foto, y empezamos a descender hasta el cruce que nos llevará por la senda que llamamos de la regadera, y que va paralelo a la acequia de captación de agua de Sorzano, nos encontramos con Jesús, que no ha madrugado y ha ido a nuestro encuentro.
En la entrada de la senda, nos dividimos, Jesús y Fernando van ha ir por el camino de arriba, sin complicaciones, y nosotros por la senda, Alberto, hombre de carretera, es el más aventurero y coge la senda a buen ritmo, más atrás nos quedamos, Javi (que nos espera), Termi, y yo.
Una senda que va alternando entre el río, y el camino, sobre todo en su inicio, luego se convierte en una senda con algún que otro tramo más o menos complicado.
En el punto de encuentro, del grupo, nos encontramos con unos bikers, Adolfo e Iñaki , que nos enseñan una preciosa senda , entre pinares, que nos deja en la parte más alta del complejo del campo de golf de Sojuela, descendemos por una pista llena de gravilla gris, bastante ancha y peligrosa, ya que es muy empinada, y llegamos a las casas del campo de golf, aquí nos despedimos de nuestros guías que nos han enseñado esta nueva senda, (habrá que repetirla más veces).
Vamos a Sojuela, por el sendero de los arrieros, y 200 metros antes de llegar a Sojuela, reviento la rueda delantera mía, y a la vez pinchazo de Fernando, solventados los contratiempos, cogemos agua en la fuente de Sojuela, y disparados para Entrena.
Fernando decide marcharse por el camino del gas ¿más rápido?, nosotros por carretera, pasamos Entrena, y por los caminos asfaltados salimos a 100 metros de la cuesta de las ex-vacas, aquí Jesús tiene un pequeño contratiempo, decide conocer la dureza del suelo en sus propias carnes.
Pasamos por Prado-Salobre, las bodegas de Lardero y a casa tranquilitos, ha sido una ruta de 60 Kms, con dos sendas una conocida y otra nueva, que a diezmado las piernas y no estamos para sprints de última hora. (¿Y Fernando?).
Vamos al bar en dónde están almorzando los “portugueses”, y ver como han vuelto de sufridos después de casi dos semanas de BTT y supervivencia, por el país vecino.
Recibo una llamada de Fernando, me dice que, se ha caído en la bajada pedregosa de la cuesta de las ex-vacas, que tiene un mogollón de rasponazos y que se va a urgencias a que le vean las heridas.
Después de asearme me acerco a urgencias y allí me lo encuentro, hecho un cromo, roto no tiene nada roto, pero el costado izquierdo desde el tobillo al hombro, con brazo incluido lleno de raspones de la grava de la zona donde se ha caído.
Fernando, vaya modo de empezar las vacaciones, bueno así le das tiempo a las heridas a cicatrizar, (que no sea más que lo aparatoso de las heridas, y que te mejores).
Una ruta bonita, pero muy accidentada, muchos pinchazos y caídas, sobre todo la última de Fernando, habrá que repetirla para quitarnos el gafe de encima.
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