24 octubre, 2017

Acedo-La Dormida-El Vallau (17 Ciclistas)


Domingo 15 de octubre.

Ruta: Acedo- Senda de la Dormida- Santa Cruz de Campezo- San Vicente de Arana_ Senda de Recabión-Sendas de Zúñiga- Acedo

Distancia: 46km
Desnivel acumulado: 1200mt
IBPindex:  107

Crónica por Jorge Muro

Miguel”cuñao”, Pepón, Santi Alonso, Edu”jabalí”, Israel, Roberto, Ana, Luis, Mikael, Iñaki, Diego, Igor San Juan, Toño, Javi, Jorge Muro, Edu”Ayuntamiento”, Vitin.

Antes de nada, decir que soy aficionado al software libre y legal, y seguidor de una de las grandes escuelas de escritores de crónicas, la de Tate Smith. Por tanto, la crónica será breve y concisa, limitándose a la descripción objetiva y fehaciente del recorrido. Al ser de carácter libre y abierto cualquier “epistolari”, aficionado o profesional, puede añadir su carga de verborrea trágico-cómica o faltona-hilarante.

7 de la mañana. Sin comentarios.

Llegamos al punto de partida, el Camping de Acedo, a las 7,35 de la mañana. Noche cerrada y con niebla, aunque una buena temperatura de unos 15º C. No se ve nada de nada, el bar está cerrado, van llegando más y más cazadores que nos hacen temer que haya una batida de caza mayor que nos impida el paso por el recorrido planeado. ¿Qué c.ñ. hacemos aquí tan pronto? ¡Que afán por madrugar los domingos!!! Es que vuestras parejas no se muestran receptivas y cariñosas los domingos por la mañana?

8.00 Partimos con una tenue luz, que poco más luminosa será el resto de la jornada. Atravesamos el pueblo de Acedo por la carretera hasta encontrar una entrada al antiguo trazado del “trenico”, el Vasco-Navarro, que unía las poblaciones de Estella y Bergara, y que ahora es una agradable y bien acondicionada vía verde. Nos introducimos en el túnel de Arquijas, de casi 2 km de longitud, y, sorpresa, no funciona la iluminación. Con un par de focos y la linterna de algún móvil conseguimos atravesarlo sin percances. Cruzarlo solo y a oscuras, acoj..


Giramos a la izquierda, antes del puente sobre la carretera y el rio Ega, y comenzamos la primera subida. Al llegar a la Ermita de Nuestra Señora de Arquijas de nuevo giramos a la izquierda y empieza un tramo más duro de ascenso. Al cabo de unos 3 km de subida durilla, llegamos a un cruce donde hay que buscar la entrada a la senda que nos llevará hacia “La dormida”. Un pequeño despiste, marcha atrás y la encontramos sin mayores problemas, aunque para algunos parece una tragedia.

Comienza una encantadora senda entre un túnel de vegetación y un piso bastante limpio. Tramos de bajada y subida hasta encontrarnos con la senda que baja desde el Yoar. A partir de aquí nos metemos de lleno en la zona de La Dormida, senda de bajada de unos 2 kms, con un firme perfecto, aunque un poco seco, y con unos cambios de sentido dentro del túnel de vegetación que parece que estemos en un videojuego. Una de las sendas más fáciles y divertidas de la zona. Todos llegamos abajo radiantes y con una sonrisa propia de un anuncio de franquicia dental.


Ya por pista, junto al rio Ega, llegamos a Santa Cruz de Campezo. Cruzamos el rio por el primer puente y nos dirigimos por carretera durante dos km hacia el norte. Salimos de la carretera por pistas de parcelaria a buscar el camino que une Orbiso con San Vicente de Arana. La niebla y el fresco de la mañana tiene una gran ventaja, no hay moscas. Es un suplicio soportar hordas de moscas, los días cálidos, durante esta subida larga y tendida.


Pasamos unas cuantas portillas con el correspondiente abre-cierra, y ante una de ellas Dieguito hace un invertido-plus, con unos gradicos de más, lo que acaba en un bonito tirabuzón sin consecuencias.
Llegamos a San Vicente de Arana donde se hace un frugal almuerzo: plátanos, barritas, geles y demás guarrerías,… y agua de la fuente.

Comienza la subida más dura del recorrido. Parece que quiere salir el sol, quizás arriba se despeje. Al principio está encementada y se sube bien, luego acaba el cemento y seguimos por una pista en buenas condiciones que se va internando en un hayedo. Aunque algunos han optado por algún atajo más duro y con peor firme.
El último km se hace mucho más duro, el suelo está en peores condiciones, con mucha piedra suelta que obliga a la mayoría a echar el pie al suelo y empujar. Además, en lugar de desaparecer, la niebla se espesa y el viento es fuerte y frio conforme coronamos. Una pena, ya que las vistas desde aquí son amplias y sosegadas.


Seguimos por toda la altiplanicie a ritmo tranquilo, agrupados para no perdernos en la niebla. Una pequeña bajada, complicada por las piedras puntiagudas y húmedas, y un último repecho por el hayedo antes de comenzar una nueva bajada.

Reagrupamiento y foto de grupo. Instrucciones sobre la bajada, alguna barrita, rodilleras algún loco, y prisas otros. Tranquilos que vamos con una hora de adelanto sobre el horario previsto.
Comienza la llamada senda de Recabión (arroyo junto al que discurre la bajada), del Barranco Vallau o de la alambrada, por la ídem que va paralela al camino en algunos tramos. El primer tramo está delicado por la humedad y las piedras, pero pronto empieza la senda divertida y en buen estado. Esto si que es como ponerse las gafas de realidad virtual y simular la persecución de las naves enemigas en “La guerra de la Galaxias” (Para la mayoría seguro que no es para tanto, pero es que yo me vengo muy arriba con estas senditas). Casi toda la bajada está bien, salvo un tramo de roca resbaladiza después de una curva cerrada, en la que paramos para avisar y evitar caídas innecesarias, y algunas roderas bastante profundas.


Nos reagrupamos abajo, comentando lo divertida que ha sido, la batida de cazadores que acabamos de atravesar y esperando a Eduardo que ha destalonado y ha tenido que parar a inflar.

Seguimos bajando hasta la carretera de Zúñiga-Gastiáin. Giramos a la izquierda, la seguimos durante 500 m y nos salimos a la derecha por un camino en subida durante 1,5 km. Comienza otra tanda de sendas muy divertidas, rodeando Zúñiga, y con menos desnivel que las anteriores. Aquí algunos experimentaron lo del “flow”. Otros siguen esperando.
Se cruza la vía verde por debajo y aparecemos en un mirador sobre el rio Ega. Una vez que todos llegan, comenzamos la última bajada del día, hasta llegar junto al rio. Seguimos la orilla izquierda del Ega sin novedades, hasta que se me ocurre desviarme por una pequeña senda que se acerca más a la orilla. La naturaleza agreste y un par de troncos caídos desalientan a mis compañeros que se dan la vuelta. Yo continúo adelante hasta incorporarme al camino principal un poco más adelante. Unos cuantos arañazos más a la colección.

Se cruza el río por un puentecillo y subimos, por camino al principio, y luego por una preciosa senda envuelta en abundante vegetación. A algunos se le atraganta. ¡Que hubieran venido con las pilas cargadas!!

Un par de kms de pista y llegamos a Acedo y de allí al camping. Son las 12.30.
Buena, bonita, divertida y para toda la familia.

Sesión de limpieza en los baños del camping.
Una vez relimpios, unos se van a casa y otros terminamos la ruta al completo.
Cerveza, o incluso marianito, estupenda y abundante comida y a casa.
Fin
PD: Aunque yo soy más de números que de letras, el boss me la ha dado. El lleva saliendo unas 40 rutas este año y se queja de que ya lleva hechas dos crónicas, que esta me toca a mí. Pero si era mi primera salida desde hace casi 10 años. Si hacemos una regla de 3, 40 es a 2 como 1 es a 1. Uhmmm, algo falla!!!




7 comentarios:

vitinbtt dijo...

Muy buena crónica Jorge y para que bajes la proporción lo que tienes que hacer es salir algún día mas con nosotros que ya sabes que te cuidamos.
Creo que pocos del gurpo habían estado por ahí, es bueno conocer estas zonas con tantas posibilidades. Las sendas son una maravilla, y aunque estaba el terreno un poco húmedo (que ya hacía falta) no impidió en ningún momento ciclarla entera.
Las duchas (gratis) en el camping son una maravilla, acabar y poder lavarte antes de comer lo es todo.
Por un día el pORtento no lo fue, venía con el jetlag de comer saltamontes por lo que no se le vio el pelo (y no literalmente, que tampoco) ni en las subidas, ni en las bajadas; las pasó canutas al no poder meterle la rueda a nadie.

Igor San Juan dijo...

Un día maravilloso unas sendas de estupendas me quite la espina del día de la marcha del camping de acedo que llovió a mares y no pude disfrutar buena crónica Jorge y lo que dice vitin sal más
Días me encantó la ruta y seguro que por aquí también te conoces unas cuantas gracias a los organizadores

Jose Miguel dijo...

Buenas rutas la verdad
Una peña top en todos los aspectos
Un saludo a todos

Edu Jabalí dijo...

Pedazo de ruta, sí señor! Un 10 a la organización, un 10 a la compañía y un 10 a la comilona!
Habrá que repetir " autro año"

Toño Pleitos dijo...

Estupenda crónica Jorge!!! Limpia y precisa como tus trazadas. Solo te falta un poco de agilidad y, lo que es más importante, buscar y encontrar tus límites. Eso con la práctica lo irás adquiriendo que tú eres muy "espabilao". De todas formas, sino los encuentras, la Cúpula te indicará amablemente que los has sobrepasado.
La ruta maravillosa y la compañía insuperable.
Tuvimos la ocasion de contemplar el espectacular vuelo del dron de Diego, pero más espectacular y majestuoso fue el vuelo del propio Dron Diego con el que culminó un aparatoso caballito invertido.

Fer Alcalá dijo...

Jorge, una pena no haber podido acompañaros en esta impresionante ruta, sobre todo porque me hubiese gustado coger el relevo al Portento, que por lo que cuentan, estaba desaparecido y daros un poco de caña en las bajadas a tí y a Diego, que os he visto un poco lentos en el video y con poca decisión en los saltos. ¡Otra vez será!

israelogro dijo...

Buena crónica Jorge.
La ruta fue espectacular, una gozada, la comilona tremenda y la compañía lo mejor.
A repetir otro año.